martes, 15 de mayo de 2012

PLAYA!!

¡Hola a todos! El domingo estrenamos la temporada playera, ay qué alegría. Como todo buen dominguero sevillano fuimos a Matalascañas, a una playa que se llama El Pico del Loro, o como lo llama Marimar, el pico del lodo, ahora os cuento por qué. Salimos de Sevilla con ganas de sol y de llegar lo antes posible pero como era de espera nos pilló un súper atasco de una hora paradas. 



Aquí estamos en el coche ya un poco desesperadas, pero bueno al menos tuvimos tiempo de contemplar las marismas de El Rocío (el que no se consuela es porque no quiere).
Cuando por fin llegamos, el hombre del parking nos avisa de que el camino hasta la playa está complicado y que cuidado con los resbalones....miedo.
Y efectivamente, para llegar a la playa hay que atravesar una especie de río con más fango que agua, y que según la amiga Marta es el desagüe del camping que hay justo arriba...es decir, para que todo el mundo me entienda...la mierda....aunque yo muy optimista de mí no lo creía porque del todo mal no olía, aunque tampoco era lo más agradable del mundo. Documento gráfico, aquí, parecerá bonito...pero no lo era. La primera foto es de la parte bonita, cuando ya se ve la playa y te animas, la segunda es de la parte "El último superviviente".



Y pooor fin llegamos! Colocación de sombrillas, neveras y demás bártulos, y por supuesto, el temido momento de carnes blancas al aire. La verdad, es que estábamos resplandecientes, y no precisamente por lo estupendas, sino por que de lo blancas que estábamos reflejábamos el sol, algo así como mirar un eclipse, con desprendimiento de retina incluido. Y todas a pelearnos por ver a quien está más, gorda y más flácida....en fin....conclusión, cada una piensa que está para esconderse pero que todas las demás están perfectas. Y primer baño de la temporada! Un poco de "aaaaay", "arrrj", "yo no me baño", "yo solo me voy a mojar como las viejas", "mójate que es bueno para los granos y te pones más morena" y "oye, pues cuando ya te metes está hasta buena". Momento comida con nuestros tuppers, de comida sana porque somos todas muy ideales (completamente falso). Y siestas bajo la sombrilla despertándose cada 10 minutos para huir del sol. 





Y después de todo esto, vuelta a casa, un poco más morenas, pero poco más, tampoco os vayáis a creer. Bueno yo exactamente llegué sin estar ya translúcida pero con un brazo rojo guiri en agosto, es lo que tiene olvidarse de echarse crema solo en un brazo. Otra vez paso por el lodazal y viendo animalitos dándose amor como bien dijo mi socia.


Y de nuevo atasco monumental, viaje que duró el doble de lo normal, cantando como si fuéramos auténticas sopranos, y con ganas de llegar. Y llegar a casa y ducharse, y pringarse de crema como si no hubiese mañana, y caer muerta en el sofá, ¿hay algo mejor?
Ahí va la crónica de un día de playa, y ¿vosotras? ¿Seguís con el blanco nuclear o también habéis tomado ya el solecito? Y recordad niños....tú me das cremita, yo te doy cremita...aprieta bien el bote que sale muy fresquita.
XOXO Carmen.



2 comentarios:

  1. Que post más gracioso! POr lo menos os lo pasasteis bien!!!! eso es lo importantee :)

    Un abrazo y te sigo

    My blog By Joyce ♥

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  2. bonitas fotos :) te sigo en bloglovin!
    unsaludo

    http://anchorhelm.blogspot.com.es/
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